¿Es saludable que la persona mayor emita pitidos con frecuencia? No, en absoluto. La sibilancia es el sonido producido por el estrechamiento en las vías respiratorias. Se presenta con mayor frecuencia en la noche y en las primeras horas de la mañana.

Aunque es un síntoma común en los ancianos mayores de 65 años, es un problema de salud que debes atender porque evidencia la disminución del oxígeno en los pulmones. Puede ser causado por alergias, bronquitis y otras infecciones respiratorias más complejas.

Los silbidos pueden reducirse con tratamientos farmacológicos efectivos que alivian la dolencia respiratoria.    

Síntomas de la sibilancia en ancianos

Los pitidos al respirar se presentan porque los bronquios y los bronquiolos se estrechan. Estos se sienten con mayor intensidad en los movimientos de exhalación del aire. Algunos son casi imperceptibles, mientras que otros pueden ser ruidos molestos que dificultan el sueño.

Se presentan frecuentemente en las noches por los cambios de temperatura y humedad en el ambiente.

Los profesionales que están al cuidado de personas mayores a domicilio deben notificar a los familiares si observan irregularidades en la respiración del anciano.

En caso de observar otros síntomas que acompañan la sibilancia, debes llevar a tu familiar al médico.

  • Inflamación del rostro y la lengua.
  • Dificultad para respirar.
  • Presión dolorosa en el pecho.
  • Confusión mental.
  • Presencia de mareos y vértigo.
  • Coloración azulada en manos y pies. Los labios adquieren un tono violáceo.
  • Pérdida de conciencia.

Causas de los pitidos 

Hay factores de riesgo, patologías base y condiciones ambientales que influyen en la aparición de la sibilancia.

  • Alergia o intolerancia.
  • Contaminación con sustancias químicas.
  • Apnea del sueño.
  • Embolia pulmonar.
  • Asma, pulmonía, bronquitis o Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica.
  • Tabaquismo.
  • Bronquiolitis.
  • Enfermedad cardiovascular.
  • Gripe.
  • Infección de las vías respiratorias.
  • Inflamación de las cuerdas vocales.
  • Cáncer de pulmón.
  • Broncoespasmo.
  • Intoxicación con humo.

Es posible que el sonido sea producido debido a la unión de estas condiciones y se agrave con otros problemas como disnea, confusión y coloración azulada en varias partes del cuerpo. Si observas que las manos, pies o labios adquieren un tono violáceo, debes llevar a la persona a emergencia porque su respiración puede verse obstaculizada peligrosamente.

Tratamiento de los silbidos en personas mayores

El médico debe comprobar a través de exámenes físicos las causas de la sibilancia. Al hacerlo, puede recetar fármacos que ayudan a dilatar progresivamente los bronquios y bronquiolos. Entre estos, se incluyen corticosteroides, mucolíticos, broncodilatadores y antiinflamatorios.

En caso de complicarse por la presencia de disnea, los cuidadores suministran oxígeno a través de cánulas nasales o mascarillas.

Es posible que el médico ordene hacer otras pruebas para descartar que la causa sean reacciones alérgicas a alimentos, productos de limpieza o fármacos.

La postura también influye en el incremento de la intensidad de los sonidos. Procura que el anciano duerma levemente incorporado con apoyo de almohadas detrás de la espalda. Al estar más erguido en la parte superior del cuerpo, se reduce el bloqueo de los bronquios con mucosidad y se facilita la respiración.

El cuidador debe alejar al anciano de los espacios próximos de agentes contaminantes, como el humo del tabaco y depósitos con productos químicos.

Medidas de prevención

Mantener la ventilación de las habitaciones y los espacios comunes de la casa ayuda a prevenir los problemas respiratorios. Puedes instalar un purificador de aire para evitar la aparición de polen, polvo y microorganismos en el lugar.

En caso de tener alfombras, cortinas y abrigos, debes aspirarlos o lavarlos con frecuencia para evitar la acumulación de polvo en los dormitorios. Lava frecuentemente la ropa con productos con olores suaves o neutros y de los utensilios como vasos y cubiertos para prevenir infecciones.

Los planes de vacunación contra la gripe y el neumococo también son maneras efectivas de fortalecer el sistema inmunológico de los ancianos.

Esas recomendaciones no sustituyen el tratamiento médico para los pitidos. Si estos sonidos persisten a pesar de la medicación, debes llevar al paciente al especialista nuevamente.

La manera más efectiva de prevenir las enfermedades respiratorias y los silbidos en los ancianos es la práctica de hábitos saludables: Alimentarse adecuadamente, hidratarse, hacer ejercicios acorde a su edad, socializar y mantener un buen estado de ánimo.

Cuidado de profesionales

Los cuidadores son enfermeros especializados que atienden con profesionalidad y cuidado a las personas mayores que no pueden ser acompañadas diariamente por sus familiares. A domicilio o en centros privados, estos expertos se ocupan de su alimentación, higiene, cuidado personal y medicación.

A su vez, los acompañan a practicar ejercicios y terapias psicomotoras y cognitivas que los ayuden a mantener su salud física, psicológica y emocional.

El cuidado implica estar atento a los cambios en sus hábitos y en su metabolismo como el inicio de la apnea y la sibilancia, problemas que pueden afectar gravemente su salud.